Gracias por seguir orando en nuestro segundo día de Capítulo General.
Las sesiones de hoy han seguido ahondando en nuestra vivencia de los votos. Los temas los ha expuesto nuestra hermana Maricruz Bergua con gran profundidad. Sus palabras han servido de antesala a la reunión de grupos. En ellos, la reflexión ha supuesto una renovación de los deseos que todas tenemos de fidelidad al Señor, y ha sido hermoso constatar, en la puesta en común, que esos deseos que resuenan en nuestros corazones los ha puesto el Espíritu Santo, que nos impulsa a todas en la misma dirección.
Esta importante revisión de nuestra vida religiosa, de la vivencia de los consejos evangélicos, supone un punto de partida ineludible para el resto de nuestra reflexión conjunta durante los próximos días.
Al final del día, con la Eucaristía, reunidas en torno al Maestro hemos vuelto a recordar que hemos sido llamadas, que todo ha sido don Suyo, y que para seguir alimentando nuestros deseos y seguir alentando nuestras luchas, Él se ha quedado en el Pan de Vida.
