top of page
  • Foto del escritorEsclavas Carmelitas

Domingo XI del T.O. 18 de Junio

Igual que en tiempos de Jesús, hoy en día también hay multitudes que se encuentran como “ovejas sin pastor”, andando sin rumbo, descarriadas. Y, al igual que entonces, pocos son los obreros en la mies del Señor.

Nosotros, que hemos recibido el regalo de la fe, no podemos quedarnos mirando con pena, compadeciéndonos, pensando que ya habrá otros que harán el trabajo Al igual que a los discípulos, el Señor nos llama por nuestro nombre para que participemos de su obra. Cada uno, en su situación particular, ha sido enviado a anunciar el Evangelio en medio del mundo.

Y aunque la tarea puede resultar abrumadora, es tan simple como dar gratis lo que gratis en su día recibimos. Si nuestras palabras y nuestros actos reflejaran mínimamente ese derroche de amor que el Señor ha tenido con nosotros, cuántos muertos resucitarían, cuántos enfermos se curarían, cuántos leprosos quedarían limpios…

Pidamos al Señor que aumente cada día el número de trabajadores de la mies y que nuestra vida refleje cada día más la gracia recibida.


Manolo Sánchez Andreú




26 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo

Todos somos jornaleros en este mundo, trabajadores que intentamos llevar a casa el sustento diario, pero también somos trabajadores en la viña del Señor, donde cada uno podemos aportar los dones que g

"No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete" Estas palabras son las que le dice Jesús a Pedro cuando se cuestiona sobre las veces que tiene que perdonar. Este evangelio propone una c

Mt 18,15-20: Si te hace caso, has salvado a tu hermano. Hoy en el Evangelio vemos a un Jesús muy "Maestro", y nos puede parecer como uno de esos expertos en resolución de conflictos, que nos descubre

bottom of page